| Noticia 22/04/2002 La iglesia de San Adrián, en Óriz, se abre al culto después de 32 años El templo ha sido reconstruido gracias a los vecinos del pueblo IÑIGO ARISTU. ÓRIZ (VALLE DE ELORZ). Ayer fue un día grande para Óriz, una pequeña localidad del valle de Elorz en la que sólo viven seis personas. Su parroquia, la iglesia de San Adrián, fue reabierta al culto después de veintisiete años de abandono y cinco de reconstrucción.
El acontecimiento no pasó inadvertido, y un centenar de personas acudieron a la misa de consagración concelebrada por el vicario general de la Diócesis de Pamplona, Luis Oroz, y el párroco de Imárcoain y Óriz, José María Crespo.  | El párroco de Imárcoain y Óriz, José María Crespo, se dirige a los presentes. Detrás el retablo restaurado |
El edificio que se encontraba prácticamente en ruinas, ha podido ser restaurado gracias al empeño de las seis familias habituales del pueblo, que han aportado toda la mano de obra posible para poder volver a tener un templo en condiciones. «Sólo hemos acudido a especialistas para los trabajos delicados que no podíamos hacer nosotros», explicó satisfecho Juan Miguel Zabalza. «Sin esa labor, el coste de la obra se hubiese duplicado fácilmente». Zabalza reside en Pamplona, pero acude a Óriz todos los fines de semana. Su hija recién nacida será el primer bebé bautizado en la nueva iglesia. Las obras de remodelación han costado 150.250 euros (unos 25 millones de pesetas) Los trabajos de remodelación del templo han tenido un presupuesto de 150.250 euros (25 millones de pesetas), aportados por el Ayuntamiento del Valle de Elorz (88.620 euros), Príncipe de Viana (28.067), la Diócesis de Pamplona (10.637) y los feligreses de la parroquia (22.838). Reforma completa La iglesia de San Adrián de Óriz fue levantada en 1610 sobre los restos de una antigua iglesia medieval. Tenía tres altares de piedra, que tras la reforma se han quedado en uno, el que ocupa la cabecera del templo. A su lado se encuentra el retablo policromado barroco construido en 1682 por Juan Varón, que también ha sido restaurado. En las capillas laterales se ha colocado una pila bautismal de la Edad Media y un Santo Cristo que hasta 1778 pertenecía a la ermita de Santa Cruz de Óriz. Las paredes han sido pintadas de blanco, y el techo, una bóveda de medio cañón, presenta un fuerte colorido apoyado por una potente iluminación. En el coro se han podido mantener la balaustrada y el escaño. Diario de Navarra >>> Todas las Noticias | |